martes, 3 de febrero de 2015

¿Por qué?

¿Por qué? Grite mil veces
Y viaje al día en que me mirabas con amor.
¿Por qué lo hiciste?
Te dije con el corazón en la mano,
cuando luego de una dulce siesta
de un día de verano
despertabas a mi lado.

¿Por qué me hiciste esto?
Te hubiera amado toda esta vida,
y todas las que vengan.
No puedo, simplemente no puedo.

¿POR QUÉ? No encuentro explicación,
no quiero que me lo expliques,
ni existe un lugar donde irme,
ni existe un lugar donde estar,
ni existe un volver a empezar.

Soy prescindible.
Soy reemplazable.

No intentes acercarte...


No hay comentarios: